Caminar después de almorzar no sólo te permitirá llegar a la meta de los 10 mil pasos diarios, sino que también estarás mejorando tu digestión. ¿Qué otros beneficios tiene? Aquí te contamos más:
Existen distintas razones por la que se sugiere caminar después de almuerzo. ¿La más importante? Mantenerse activo, eliminar el sedentarismo de nuestra vida y cumplir el objetivo de los 10 mil pasos diarios.
Con la ayuda de Macarena Lillo, Nutricionista de Clínica Alemana Osorno, te contamos sobre las ventajas de caminar después de almorzar:
Mantenerse activo
Tras la pandemia, el sedentarismo, el sobrepeso y la obesidad aumentaron significativamente en
todo el mundo. Para combatirlo, el equipo de Clínica Alemana Osorno se propuso una serie de retos que nos permitirá mantenernos activos.
Por esta razón, caminar es una buena manera de mantenernos ágiles y activos. “Lo ideal es almorzar y dejar unos minutos del tiempo de colación para caminar y dar una vuelta a la manzana. Eso nos ayudará a continuar la jornada laboral de mejor manera”, explicó la nutricionista.
Te da energía para la jornada laboral
Como dijo Macarena, caminar nos dará más ánimo para enfrentar la segunda etapa de la jornada
laboral. “Caminando eliminarás la fatiga propia de la tarde. Esto, acompañado de una botella de
agua, te permitirá mantenerte hidratado y lograr una mejor digestión y metabolización de los
nutrientes ingeridos durante en servicio del almuerzo”, añadió.
Mantiene bajos niveles de glucosa
La idea no es hacer ejercicio físico intenso, sino que caminar ayuda a incrementar el NEAT o
termogénesis asociada a actividades que no son ejercicio propiamente tal; dichas actividades nos permiten aumentar el gasto energético total de un día y romper la inactividad física; asociada a muchos trabajos actualmente. “El caminar permitirá que la glicemia y sus picks post prandial sean más atenuados. Esto les favorece a todos, especialmente a quienes padecen de condiciones clínicas tales como; Diabetes mellitus o resistencia a la insulina”, dijo Macarena.
Mejora la digestión
Caminar y beber agua mejoran la digestión, independiente de la hora. Mejor aún, si es después de almuerzo. “Hay personas que comen y duermen siesta. Lo importe es caminar y, así, evitar
enfermedades como reflujo u otras similares que nos harán sentir peor”, complementó la
especialista.
Reduces el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Caminar después de la comida también favorece a reducir los riesgos de enfermedades
cardiovasculares y de presión arterial. Además, combates el sobrepeso y cualquier patología
asociada al sedentarismo.
Despejas tu mente
Caminar antes de iniciar el trabajo favorece el buen ánimo, despeja y ayuda con la concentración.
Entonces ¿qué esperas? Hay una serie de beneficios que no sólo te ayudarán en el ámbito físico,
sino que también en el psicológico y emocion
